El Gabinete Psicopedagógico Kaposkly, socio de ASUC

Asociación de Superdotados de Cádiz (ASUC)

El Gabinete Psicopedagógico Kaposkly, y su psicopedagogo, Rafael López Azuaga, son entidad colaboradora y socio colaborador, respectivamente, de la Asociación de Superdotados de Cádiz (ASUC). Su finalidad es apoyar las diferentes actividades educativas llevadas a cabo desde la asociación. ¿Cómo contribuimos?:

  • Realización de talleres educativos para los hijos de los socios.
  • Participar en la escuela de Padres a través de la impartición de sesiones y talleres.
  • Ofrecer asesoramiento.
  • Ofrecer un 20% de descuento en las tarifas de nuestros servicios a los socios interesados.

Si queréis más información, no dudéis en contactar.

Las ventajas del aprendizaje basado en problemas y proyectos

Aprendizaje basado en proyectos en Cádiz
Imagen obtenida de: http://educacion.ufm.edu/wp-content/uploads/2014/04/aprendizaje.png

Para trabajar con estudiantes con altas capacidades intelectuales, he decidido escoger la metodología del aprendizaje basado en problemas y proyectos. Es una metodología que es recomendable aplicar en cualquier aula, pero como habitualmente se trabajan otro tipo de metodologías, he decidido escoger esta. ¿Por qué?

Lamentablemente, a lo largo de los años, siempre se han subestimado al alumnado que presenta altas capacidades intelectuales, antiguamente conocidos como «alumnos superdotados». Se creían que tenía tal potencial que no necesitaban ningún tipo de ayuda, y que mientras podrían ocuparse del resto de alumnos. Esto era una creencia falsa. El alumno superdotado simplemente es una persona que tiene una capacidad para aprender más rápida de lo normal. Es posible que en un futuro pueda sacar brillantes notas, no se sabe, pero puede que no. Hay alumnos que han demostrado desinterés por la metodología y contenidos que se trabajan en clase, y han hecho que su rendimiento sea escaso porque se aburren en clase. Suspenden año tras año, y si luego en en la etapa de Educación Secundaria cuando se percatan de que puede presentar altas capacidades intelectuales, puede ser complicado recuperar al alumno. Puede ya tener demasiado retraso en adquisición de aprendizajes básicos y habría que realizar un gran trabajo para «ponerlo al día». Y esto sin contar con aquellos estudiantes que no rinden a propósito por miedo a ser rechazados por otros compañeros por considerarlo un «empollón», o incluso un «niño repelente».

¿Por qué he escogido entonces esta metodología? A muchos niños con altas capacidades intelectuales les entusiasman los retos. Necesitan una estrategia que les permita motivarles y estimularles. Puede que a ellos les aburra estar escuchando horas y horas a una persona soltando un discurso, así que puede que para aprender le venga mejor él mismo descubrir y analizar la información.

Como se trata de una actividad extraescolar, prefiero que sea el propio alumno el que decida escoger el tema que va a trabajar. Realizo una entrevista inicial, e incluso le muestro un pequeño cuestionario para que me ordene, por preferencia, una serie de temas. Con ello, le planteo un problema, que luego puede desembocar en que desarrolle un proyecto propio para resolver ese problema. Aquí la labor del psicopedagogo es la de orientarle en todo este proceso de aprendizaje. Sigue los principios del constructivismo, que es aquel que permite que sea el propio alumno el que vaya construyendo sus propios conocimientos. Conlleva a que se produzcan aprendizajes significativos y relevantes, que permitirán ser duraderos. Sobre todo se valora la adquisición de nuevas habilidades que les sirvan para resolver situaciones que puedan surgirles en su vida cotidiana.

La búsqueda de información, analizar diferentes textos y extraer ideas, plantear nuevas soluciones, aprender a redactar un proyecto formal con todos sus apartados y cuidando la expresión escrita y la ortografía, preparar esquemas u otros formatos para exponer y presentar el proyecto…Son aprendizajes que pueden servirles para el futuro. Lo mejor es que el alumno puede disfrutar de un sistema de aprendizaje más práctico, que le permita ser un sujeto activo en la construcción de sus aprendizajes, y no un receptor de información facilitada por el docente, como si sus mentes fuesen «bancos de conocimientos».

Es solo una metodología más, porque también existen otras tareas interesantes que podemos plantearles. Más adelante lo hablaremos.